Estaba claro que tarde o temprano los efectos del Plan PIVE o el Plan PIMA Aire, entre otros, tendrían un efecto directo en el nivel de emisiones de CO2 del parque automovilístico español. Según los datos que ha publicado Anfac y de los que nos hacemos eco, la cantidad media de emisiones de CO2 de los coches vendidos en España durante el pasado año 2013 se situó en los 122,4 g/km, lo que se traduce en una caída del 4,8% en comparación con los datos del 2012, cuya cifra era de 128,7 g/km.
Gracias a dicha disminución, España se posiciona como uno de los países europeos más eficientes y, de entre los cinco principales mercados (Francia, Reino Unido, Italia y Alemania), solo Francia está por delante de España. Estaba claro que el ofrecer planes de incentivo a la compra de coches y vehículos comerciales más eficientes a cambio de retirar de la circulación coches antiguos de baja eficiencia acabaría repercutiendo en la media de emisiones.